¿Cuáles son las enfermedades respiratorias más frecuentes?
En la neumología, especialidad médica centrada en el estudio de enfermedades de los pulmones y el árbol respiratorio, hay ciertos síntomas y signos clínicos frecuentes y muy comunes para diferentes enfermedades, los cuales pueden ser la disnea, tos y mucosidad, dolor torácico y sibilantes respiratorios principalmente. Pero también podemos encontrarnos con otros hallazgos clínicos más específicos de ciertas entidades, como pueden ser los crepitantes secos, acropaquías, ronquidos y apneas del sueño…
Aunque las enfermedades descritas en la neumología son muchas, las más frecuentes y prevalentes son las que a continuación describimos, enumerando sus principales características.
EPOC, la «enfermedad desconocida»
La EPOC, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedad causada principalmente por el tabaco, tanto activo como pasivo, generando una inflamación crónica del árbol bronquial o destrucción de los sacos alveolares (producción de enfisema pulmonar). En este caso, la clínica habitual es la disnea des de leve hasta invalidante, tos con expectoración crónica junto con la aparición de comorbilidades o complicaciones como insuficiencia cardíaca.
Para poder hacer un correcto diagnostico se han descrito los fenotipos de la enfermedad y los principales tratamientos son los fármacos broncodilatadores inhalados y oxigenoterapia.
Asma, la enfermedad crónica más frecuente en la infancia
En frecuencia y “popularidad”, tenemos que hablar del asma bronquial, enfermedad inflamatoria crónica de las vías respiratorias, que cursa con hiper respuesta bronquial (HRB) y una obstrucción variable del flujo aéreo, total o parcialmente reversible espontáneamente o con tratamiento. Hay diferentes factores que provocarán una crisis o mantendrán la sintomatología, como factores atmosféricos, domésticos como los ácaros y laborales como polvo de madera, por ejemplo.
Se diagnostica principalmente con la realización de una espirometría forzada, y con el correcto diagnóstico deberemos hacer una clasificación de su gravedad. En este caso, su tratamiento también está basado en los fármacos inhalados, principalmente los corticosteroides y la fisioterapia respiratoria.
EPID, grupo de enfermedades con más de 150 causas diferentes
Cuando hablamos de las EPID, acrónimo de enfermedad pulmonar intersticial difusa, son un grupo de enfermedades que tienen en común la afectación e inflamación del intersticio pulmonar, siendo éste el tejido conectivo que da soporte a los alvéolos.La Fibrosis Pulmonar Idiopática (FPI) y la sarcoidosis son las enfermedades más comunes de este tipo.
La afectación intersticial puede estar limitada a una zona del pulmón o afectando a diferentes zonas. Puede presentarse de forma aislada o bien puede ir asociada a otras enfermedades autoinmunes.
La clínica inicial es la tos seca y la disnea, progresando a debilidad muscular y afectación generalizada. La visualización de las lesiones pulmonares en el TAC de tórax puede no ser suficiente, precisando a veces de biopsia pulmonar para su diagnóstico definitivo.
Aunque no hay un tratamiento definitivo curativo, los llamados anti fibróticos, la oxigenoterapia domiciliaria y la fisioterapia respiratoria enlentecen su progresión.
Fibrosis Quística, enfermedad genética de las glándulas mucosas y sudoríparas
La fibrosis quística es una enfermedad con afectación pulmonar junto con el sistema digestivo, aunque la pulmonar es la más grave. Es una enfermedad genética, con afectación de una proteína defectuosa (denominada RTFQ), provocando una alteración en la concentración de agua y sal del moco, transformándolo en una secreción espesa con facilidad para acúmulo de bacterias causando infecciones.
Se diagnostica mediante el cribado neonatal. Tratamientos como la aspiración de secreciones y la fisioterapia respiratoria están enfocados en tratar y paliar los síntomas y complicaciones de la enfermedad.
Hipertensión Pulmonar, cuando aumenta la presión en las arterias de los pulmones
Y para finalizar este bloque neumológico, hablar de la hipertensión pulmonar, una entidad en dónde hay un aumento de la presión de la arteria pulmonar y sus ramificaciones con afectación directa sobre el llamado corazón derecho. En muchos de los casos no hay una causa clara desencadenante, mientras que se han descrito causas propias pulmonares, cardíacas, sistémicas e incluso provocadas por fármacos o sustancias externas.
Habitualmente la clínica suele ser la disnea y cuando aparece implica que la enfermedad está avanzada. La prueba diagnóstica definitiva es el cateterismo cardíaco derecho y tratamientos como la oxigenoterapia domiciliaria entre otros van encaminados a tratar la enfermedad causante o bien vasodilatar las arterias pulmonares para reducir su presión.