Animales de compañía y enfermedades respiratorias: Beneficios y consideraciones
Los efectos positivos de los animales domésticos sobre la salud mental y física de las personas está documentada en numerosos estudios científicos. Pero, ¿qué repercusiones hay en la salud respiratoria de las personas que viven con EPOC o asma?
Los animales domésticos son una parte esencial de la vida de muchas personas. Proporcionan compañía, amor incondicional y un motivo constante para mantener la actividad y la motivación en el día a día.
Sin embargo, cuando se trata de personas que viven con enfermedades respiratorias como la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), surge la pregunta: ¿Es seguro tener una mascota? La respuesta, como muchas otras en la vida, depende de varios factores.
En este artículo, exploraremos los beneficios y las precauciones que las personas con EPOC y otras patologías respiratorias como asma deben considerar antes de tener animales de compañía.
Beneficios emocionales y físicos de tener animales domésticos
La conexión entre humanos y animales ha sido documentada en numerosos estudios científicos, que destacan los efectos positivos de las mascotas sobre la salud mental y física de las personas.
Para los pacientes de EPOC, estas relaciones pueden ser incluso más significativas. Algunas personas afirman que los animales domésticos les ayudan a mejorar el estado de ánimo, reducen el estrés y promueven una sensación de bienestar general. Esto puede ser crucial para cualquier persona que vive con una enfermedad crónica. El simple hecho de acariciar a un perro o un gato puede disminuir los niveles de cortisol (hormona relacionada con el estrés)[1], reducir la presión arterial [1] [2] y liberar oxitocina, la hormona del bienestar, generando una sensación de calma y conexión.[2]
El manejo de la enfermedad puede ser una batalla diaria para los pacientes de EPOC. Por ello, el apoyo emocional proporcionado por una mascota puede ser de gran ayuda. Los animales ayudan a reducir la soledad [1], uno de los problemas emocionales más comunes en personas que sufren enfermedades crónicas. Además, muchas personas con animales domésticos encuentran en sus mascotas la motivación para mantenerse activo.
Actividad física moderada y mejora en la calidad de vida
Tener una mascota, especialmente un perro, fomenta la actividad física moderada [1], que puede ser beneficiosa para pacientes con EPOC. Las caminatas breves y regulares pueden ayudar a mejorar la circulación, la función pulmonar y el bienestar general. [3]
Aunque el esfuerzo físico excesivo no es recomendable para quienes viven con esta enfermedad, la actividad moderada, como caminar con una mascota, puede ser extremadamente positiva. Algunos expertos destacan que los pacientes con EPOC que pasean a sus perros regularmente afirman sentirse más motivados y experimentan una mejoría en su estado físico, siempre que sigan las recomendaciones de su médico.
Consideraciones y riesgos para personas con EPOC
A pesar de los beneficios, los pacientes con enfermedades respiratorias deben tener en cuenta ciertos riesgos potenciales antes de adoptar un animal de compañía. Uno de los principales factores a considerar es la posibilidad de alergias. Los pelos de animales, así como la caspa que desprenden, pueden agravar los síntomas de la EPOC.
Algunos estudios[4] mencionan que los alérgenos provenientes de las mascotas podrían aumentar el riesgo de infecciones respiratorias y dificultar la respiración en pacientes sensibles.
Para las personas que ya tienen una mascota y descubren que tienen EPOC, no es necesario tomar decisiones drásticas. Existen medidas que pueden ayudar a reducir la exposición a los alérgenos. Por ejemplo:
- Cepillar regularmente al animal.
- Mantener la casa bien ventilada.
- Utilizar purificadores de aire y establecer zonas libres de mascotas dentro del hogar, especialmente en las zonas de descanso.
- Mantener un alto nivel de limpieza en el hogar para minimizar la acumulación de pelo y caspa en alfombras y muebles.
1. Conoce tus triggers
Antes de adoptar un animal de compañía es crucial entender qué puede desencadenar tus síntomas respiratorios. Las alergias a los animales son comunes y pueden ser provocadas por la caspa, saliva, orina o incluso el pelo de los animales.
Si ya tienes una mascota, considera realizarte pruebas de alergia para identificar si tu animal es un factor desencadenante.
2.Elige el animal de compañía más adecuado para ti
Si sigues adelante con tu idea de adoptar un animal de compañía, debes saber que algunas mascotas son más “compatibles” con las enfermedades respiratorias y menos probables de causar problemas. Por ejemplo:
- Peces: No producen caspa ni pelos.
- Reptiles y Anfibios: Como tortugas, lagartos y ranas, que también tienen una baja probabilidad de causar alergias.
- Aves: Aunque menos comunes, algunas personas con problemas respiratorios pueden tolerar bien a las aves, siempre y cuando se mantenga la jaula limpia.
Si prefieres un mamífero, busca razas hipoalergénicas de perros y gatos que produzcan menos caspa. En el caso de los perros, algunas de las razas recomendadas son Shih Tzu, caniche, labradoodle o perro de agua portugués, entre otros. [5]
Es muy recomendable que la elección de una mascota esté basada en las recomendaciones médicas y en las preferencias personales del paciente. Antes de adoptar un animal de compañía, es recomendable pasar tiempo con el animal para observar si se producen síntomas respiratorios como falta de aliento o tos.
3.Mantén tu casa limpia y libre de alérgenos
Para garantizar que la convivencia con un animal de compañía sea lo más saludable posible, es crucial mantener un ambiente limpio y bien ventilado. Los pacientes con EPOC deben evitar la acumulación de polvo, pelos y caspa en el hogar, ya que estos pueden desencadenar síntomas respiratorios.
Para minimizar los desencadenantes respiratorios y el riesgo de alergias, es esencial mantener una higiene estricta que incluya:
- Baños regulares: Baña a tu mascota con regularidad para reducir la acumulación de caspa.
- Cepillado: Cepilla a tu mascota fuera de casa para evitar que el pelo suelto y la caspa se acumulen en el interior.
- Limpieza del hogar: Aspira y limpia tu hogar a menudo, especialmente la ropa de cama del animal. Usa una aspiradora con filtro HEPA para atrapar partículas finas de caspa y polvo.
4.Establece una zona libre de animales de compañía
Reserva alguna estancia de tu hogar como zonas libres de mascotas, especialmente el dormitorio. Esto te proporcionará un espacio donde puedes respirar libremente sin la presencia de alérgenos.
5.Utiliza filtros y purificadores de aire
Considera la instalación de filtros de aire de alta eficiencia (HEPA) en tu sistema de calefacción y aire acondicionado, así como purificadores de aire portátiles en las estancias donde pasas más tiempo. Estos dispositivos ayudarán a reducir la cantidad de alérgenos en el aire.
6. Dormir con mascotas, ¿es una buena idea?
Una de las grandes preguntas que surgen cuando se trata de personas con EPOC y animales domésticos es acerca de si es recomendable compartir la cama con el animal.
Si bien dormir con una mascota podría no impactar en la calidad del sueño. Para los pacientes con problemas respiratorios, esta puede no ser la mejor opción. Compartir la cama con un animal puede aumentar la exposición a alérgenos y dificultar la respiración durante la noche.
Aún y eso, si decides compartir tu cama con mascotas, puedes minimizar los riesgos lavando la ropa de cama y las mantas del animal con regularidad y manteniendo las áreas de descanso bien ventiladas. Además, también puede ser útil consultar a un médico para asegurarte de que la presencia del animal de compañía no esté afectando la calidad del sueño o agravando tus síntomas respiratorios.
7. Habla con tu médico
Relacionado con el punto anterior, es esencial mantener un seguimiento constante de tu salud respiratoria. Cuando tengas visita con tu médico, infórmale sobre tu convivencia con mascotas especialmente si notas cualquier cambio en tus síntomas. Esto permitirá realizar los ajustes necesarios en tu tratamiento.
8. Medicación y plan de acción
Asegúrate de tener tu medicación de rescate a mano y sigue tu plan de acción para el asma o EPOC según te ha prescrito tu médico. En caso de una reacción alérgica severa o exacerbación de síntomas, busca atención médica inmediata.
9. Educación y adaptación
Habla con tu familia y visitantes sobre tus necesidades específicas y cómo pueden ayudarte a mantener un entorno seguro. La colaboración de tus seres queridos es fundamental para manejar tu condición de manera efectiva.
Vivir con enfermedades respiratorias no significa que debas renunciar a la alegría de tener un animal de compañía. Con las precauciones adecuadas y una buena gestión del entorno, puedes disfrutar de la compañía de tus animales domésticos mientras cuidas de tu salud.
Recuerda que estas recomendaciones son orientativas. En ningún caso sustituyen la información proporcionada por tu médico. Si tienes alguna duda, consulta a tu profesional sanitario de referencia que te podrá aconsejar lo que es lo mejor para ti.
[1] National Institutes of Health (NIH). El poder de las mascotas. Enlace
[2] Ontiveros, E. 10 razones por las que es bueno estar cerca de los animales (y cómo ellos también se benefician de nuestra compañía). BBC News. Enlace
[3] Los pulmones y el ejercicio. European Lung Foundation (ELF). Enlace
[4] Aydin O, Çelik GE, Onen ZP, Yilmaz I, Ozdemir SK, Yildiz O, Mungan D, Demirel YS. Triggers of asthma and COPD: Are they different? Science Direct Allergologia et Immunopathologia Volume 41, Issue 1, January–February 2013, Pages 30-36. Enlace
[5] Flynn, A. COPD And Pets: Can I Have A Dog If I Have COPD? Enlace