La importancia de la dieta y la actividad física en el tratamiento para la Fibrosis Pulmonar Idiopática (FPI).

La Fibrosis Pulmonar Idiopática (FPI) es una patología respiratoria rara que afecta a unas 7000 personas en España, aproximadamente, según los datos del Centro de Investigación Biomédica en Red Enfermedades Respiratorias (CIBERES). Es una enfermedad crónica y progresiva que avanza cicatrizando el tejido pulmonar, endureciéndolo y volviéndolo rígido, haciendo que poco a poco sea más difícil que el oxígeno llegue a la sangre (llegando a necesitar oxigenoterapia si los niveles son muy bajos).

Los síntomas comienzan a percibirse cuando la enfermedad ya ha avanzado y buena parte del tejido pulmonar sano ha sido sustituido por tejido cicatricial. Algunos de estos síntomas son:

• Tos seca.
• Dificultad para respirar.
• Fatiga.
• Dolor muscular y articular.
• Pérdida de peso sin explicación.
• Deformación en los dedos (dedos en palillos de tambor, hipocráticos o acropaquia).

Aunque no se conoce una causa concreta para la aparición de la Fibrosis Pulmonar Idiopática (la propia palabra “idiopática” hace referencia a ello), sí se sabe que hay algunos factores que pueden influir en ella como contaminación ambiental, factores genéticos, algunos medicamentos y otros.

Según la British Lung Foundation, la fibrosis en el tejido pulmonar responde a una lesión en el pulmón que puede estar causada por reflujo gastroesofágico o algunos virus (como el herpes o la hepatitis C), además de diferentes factores ambientales.

La poca prevalencia dificulta su estudio y, actualmente, el tratamiento se centra principalmente en ralentizar el avance en la persona afectada, aliviar sus síntomas y mejorar su calidad de vida.

De la misma forma que hay factores que pueden influir negativamente en la FPI, hay otros que pueden influir positivamente, como son la alimentación y la actividad física.

¿Cómo afecta la alimentación a la Fibrosis Pulmonar Idiopática?

La alimentación es importante, independientemente de nuestra condición, pero las personas con FPI pueden verse especialmente beneficiadas de una dieta sana y equilibrada. Aunque existe la posibilidad de la pérdida de apetito, es necesario mantener unos buenos hábitos alimenticios y no dejar de comer de forma reglada.

Esto puede ayudar a hacer frente a algunos síntomas de la FPI como la pérdida de peso, que se origina debido a un mayor gasto energético para respirar a causa de la dificultad que provoca la fibrosis. Si este fuera el caso, podemos fraccionar las comidas y aumentar las ingestas a lo largo del día para no sentirnos obligados a comer.

Algunas recomendaciones alimenticias para personas con FPI son:

• Beber mucha agua, mínimo dos litros al día. Especialmente si vas a realizar alguna actividad de forma continuada.
• Reducir el consumo de alimentos ricos en sodio, grasas trans y saturadas y azúcares añadidos.
• Incluir alimentos ricos en proteínas en las comidas: leche, huevos, carnes, pescado azul, legumbres y otros.
• Tomar verduras y frutas, salvo contraindicación médica, siempre serán beneficiosas. Las vitaminas y minerales nos ayudan a reforzar nuestro sistema inmune.
• Aumentar nuestras reservas energéticas gracias a los carbohidratos, especialmente los que son ricos en almidón y los granos integrales (salvo contraindicación por alguna causa digestiva).
• En caso de diarrea, se recomienda dieta blanda que incluya arroz, pan tostado, plátano y otros alimentos astringentes.
• Evitar las bebidas azucaradas, como los zumos o los refrescos.
• Si sufres pérdida de peso, los alimentos ricos en grasas saludables pueden ayudar a contrarrestar este efecto.

Por supuesto, estos solo son consejos generales que nunca sustituirán a las recomendaciones que pueda hacer un profesional médico. Es importante que cada tratamiento se ajuste a las necesidades de cada paciente (incluyendo la dieta), ya que lo que es efectivo para una persona no tiene porqué serlo para otra. Consulta siempre con tu médico.

¿Cómo beneficia la actividad física a las personas con Fibrosis Pulmonar Idiopática?

Las personas con Fibrosis Pulmonar Idiopática experimentan dificultades al respirar que pueden limitar su movilidad, afectando tanto física como psicológicamente. De la misma forma que ocurre con la alimentación y, salvo que tengamos alguna lesión o patología que desaconseje realizarla, la actividad física siempre es beneficiosa.

Mantenerse activo en esta situación aporta un doble beneficio. Por un lado, contribuimos a mejorar el control de la FPI y, por el otro, reducimos el estrés causado por nuestra dolencia. Las patologías crónicas tienen un fuerte componente psicológico y emocional que la actividad física puede minimizar y mejorar.

Como es habitual que los pacientes con FPI sufran disnea (sensación de falta de aire y dificultad al respirar, causada por los bajos niveles de oxígeno), es difícil que se siga una rutina de ejercicios de forma continuada. Aun así, es importante elaborar una pauta física que se ajuste a nuestro estado y que permita llevar una vida funcional.

El ejercicio físico puede aportar muchos beneficios a las personas con FPI:

• Mejora nuestra salud cardiovascular.
• Mejora nuestro sistema musculoesquelético.
• Ayuda a controlar el peso (junto con la dieta).
• Mejora nuestro descanso.
• Mejora nuestro estado de ánimo.

Aunque la capacidad pulmonar no se verá directamente beneficiada debido a las características de la Fibrosis Pulmonar Idiopática, las mejoras en el sistema muscular y cardiovascular sí que ayudan a llevar más oxígeno a nuestro torrente sanguíneo.

Una vez más, hemos de recordar que ha de ser un profesional sanitario el que nos ayude a establecer una pauta de ejercicios que se ajuste a nuestras necesidades y que seamos capaces de realizar. Mantenernos activos ayudará a mejorar nuestra calidad de vida, pero no es aconsejable hacerlo sin supervisión.

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Referencias

• Nutrition and Pulmonary Fibrosis (American Lung Association) https://www.lung.org/lung-health-diseases/lung-disease-lookup/pulmonary-fibrosis/patients/living-well-with-pulmonary-fibrosis/nutrition

• Why is my diet important? (British Lung Association) https://www.blf.org.uk/support-for-you/eating-well/eating-a-healthy-diet

• Faverio, P., Bocchino, M., Caminati, A., Fumagalli, A., Gasbarra, M., Petruzzi, A., et al. (2020). Nutrition in Patients with Idiopathic Pulmonary Fibrosis: Critical Issues Analysis and Future Research Directions. Nutrients, 12(4), 1131. https://doi.org/10.3390/nu12041131

• ¿Se debe modificar la alimentación ante una fibrosis pulmonar idiopática? (Barnaclinic) https://www.barnaclinic.com/blog/nutricion/alimentacion-ante-una-fibrosis-pulmonar-idiopatica/

• Idiopathic Pulmonary Fibrosis: Diagnosis and Treatment. (2000). American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine, 161(2), 646-664. https://doi.org/10.1164/ajrccm.161.2.ats3-00

• Vainshelboim, B. (2016). Exercise training in idiopathic pulmonary fibrosis: is it of benefit? Breathe, 12(2), 130-138. https://doi.org/10.1183/20734735.006916